Un cielo
de estrellas perforado
donde los cósmicos rayos se filtran,
cual mirada de bíblicos patriarcas
cuyas pupilas
nos contemplaran
asombrados.
Espían
-condescendiente éxtasis-
mi amor y tus caricias;
la sensibilidad reaccional
de nuestras pieles
en contacto etéreo
estremecidas.
Con dedos de eternidad
me reconoces.
Y yo despierto
la pasión ardorosa de mi sangre
al contacto sutil
que corporiza
esa cualidad inexplicable
de ser cuerpo-espíritu desdoblados
para esta allá,
estar aquí
en simultaneidad de tiempos;
dos seres humanos
convocantes
de la realidad vital
del existir a diario
transportando
las células del alma
por la permisiva magia mental
que concretiza
la unión espiritual.
¡Nos transformamos
en esta nueva realidad
de amarse
más allá de todo lo existente!
Haydée Norma Podestá
(Rincón del río, Córdoba, 24/03/08)
En "Fronteras del viento, Granadero Baigorria, Acuarela, 2012
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