A veces se hace lo que decidió Adriana...demasiados nudos para desatar en las relaciones cotidianas familiares...se tomó un ómnibus a Buenos Aires, avisó a todos cuando la fuimos llamando para verla o tomar un café o ir a su casa, y se tomó un domingo libre y sola para recorrer lugares de la ciudad capital y así poder desenchufarse.Pensar, recrear la vista y el espíritu, desestresarse.Me tranquilizaron el tono de su voz y sus palabras "Mamá, estoy bien. Quería hacer un día lo que tengo ganas y no estar viendo qué quieren los demás"...y yo seguí mis obligaciones cotidianas, aunque mi corazón estaba junto a ella, rodeándola, protegiéndola y envolviéndola con mi amor.
Otras veces se hace lo que me respondió Eugenia a mi angustia..."Ella no tiene hijos y puede hacerlo...¡Sabés cuántas veces yo quisiera irme y no puedo!Entonces salgo a dar una vuelta caminando..."
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A veces se hace lo que decidió Adriana...demasiados nudos para desatar en las relaciones cotidianas familiares...se tomó un ómnibus a Buenos Aires, avisó a todos cuando la fuimos llamando para verla o tomar un café o ir a su casa, y se tomó un domingo libre y sola para recorrer lugares de la ciudad capital y así poder desenchufarse.Pensar, recrear la vista y el espíritu, desestresarse.Me tranquilizaron el tono de su voz y sus palabras "Mamá, estoy bien. Quería hacer un día lo que tengo ganas y no estar viendo qué quieren los demás"...y yo seguí mis obligaciones cotidianas, aunque mi corazón estaba junto a ella, rodeándola, protegiéndola y envolviéndola con mi amor.
Otras veces se hace lo que me respondió Eugenia a mi angustia..."Ella no tiene hijos y puede hacerlo...¡Sabés cuántas veces yo quisiera irme y no puedo!Entonces salgo a dar una vuelta caminando..."
La vida pasa por no huir si no todo lo contrario, VIVIRLA.
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