jueves, 21 de noviembre de 2013

TRISTEZA...



Una poesía de la escritora María Rosa Leoni, que conmueve...

Olvidó la sonrisa que tenía en su cara,
apareció una mueca que marcó su boca,
se quedó mirando hacia el horizonte,
no escuchaba el río, ni olía a las flores. Nadie lo miraba.

Se le hizo la noche en plena mañana
no sabe siquiera lo que le pasaba.
Donde esta su mente donde esta su vida,
que extraña maraña enredó sus días.

Nadie se detiene, nadie lo vigila.
Él no mira a nadie, ni nadie lo mira.
Y pasan las horas, y pasan los días,
y todas las tardes se sienta en un banco de lejana plaza.

Esperando acaso que alguien regrese,
le tienda una mano, lo abrace, lo bese.
Una mueca triste dibuja su cara,
no hay una sonrisa, no hay luz en su alma.

Se murió de a poco, se murió despacio
se fue con su pena, sin que sus recuerdos volvieran al alma
nunca supo nadie, cual era la pena
se murió en la noche, de aquella mañana.

María Rosa Leoni

11-11-13

sábado, 16 de noviembre de 2013

OCASO

La luz sedácea de la tarde fría
refleja un cielo azul de porcelana
en la cara inerte de las ventanas,
pulsando una inquieta melodía.

El orbe queda como suspendido
en un extraño juego de ilusiones
porque parecen yertas sensaciones
del paisaje, cada rasgo vívido.

El horizonte gesta una luna
que anuncia con timidez la noche.
Marcando el fin de las horas diurnas

el coro de las aves, como un broche,
estalla su concierto en la bruma
que va envolviendo el alma de los hombres.


Haydée Norma Podestá
Rosario, 16/11/13
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