miércoles, 30 de diciembre de 2009

¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO!!!

HACE APENAS UNA SEMANA, RENACÍAN EN EL ALMA Y EN LOS CORAZONES, LOS VALORES QUE SE ENCARNAN EN ESE HUMILDE NIÑO NACIDO EN BELÉN, QUE YO RECONOZCO COMO MI NIÑO-DIOS, PERO AL CUAL, NADIE PUEDE DEJAR DE VER COMO UN MENSAJERO ESPIRITUAL INVALORABLE.

AHORA ESTAMOS CAMINANDO LAS ÚLTIMAS HORAS DE UN AÑO QUE CARGA TRAS DE SÍ CON UNA DÉCADA, LA PRIMERA DE ESTE SIGLO XXI, DURANTE LA CUAL, LA VISIÓN INDIVIDUALISTA TOMADA COMO BANDERA POR ALGUNOS, HA PERJUDICADO A MUCHOS HABITANTES DE LA TIERRA Y AL MISMO PLANETA, QUE ES NUESTRA CASA EN EL UNIVERSO.

POR ESO ES MI DESEO PARA TODOS LOS QUE VAMOS A COMPARTIR ESTE PASO AL 2010, QUE LO HAGAMOS
  • CON LA RESPONSABILIDAD DE SABER QUE DEBEMOS PRESERVAR Y SANEAR EL MUNDO QUE NOS FUE DADO PARA LAS GENERACIONES VENIDERAS...
  • CON LA SOLIDARIDAD DE ENTENDER QUE TODOS SOMOS IGUALES COMO PERSONAS, MÁS ALLÁ DEL LUGAR O DE LAS CIRCUNSTANCIAS EN LAS CUALES NACIMOS...
  • CON LA CERTEZA DE QUE EL AMOR ES EL VALOR UNIVERSAL QUE DA CABIDA A TODOS LOS SENTIMIENTOS POSITIVOS PARA LA HUMANIDAD...
  • CON LOS DESEOS DE PAZ, JUSTICIA SOCIAL Y ANHELOS DE UNA FELICIDAD POSIBLE PARA LOS HOMBRES Y MUJERES POR IGUAL...
  • CON LA CONVICCIÓN DE QUE LA INFANCIA DEBE SER CUIDADA COMO TAL ...
  • CON EL FIRME PROPÓSITO DE QUE LA VIOLENCIA Y TODO LO QUE ELLA CONLLEVA DEBE SER ERRADICADO PARA HACER DEL MUNDO UN LUGAR DIGNO PARA VIVIR...
  • CON MUCHAS GANAS Y MUCHA PASIÓN PARA TRABAJAR PORQUE TODO ESTO SEA REALIDAD, DESDE NUESTRO PEQUEÑO LUGAR EN EL ESPACIO SIDERAL...

UN BESO Y UN ABRAZO ENORMES PARA TODOS...¡¡¡MUCHA MUY BUENA SUERTE Y MUCHÍSIMAS BENDICIONES!!!...QUE DIOS LOS CUIDE Y LOS PROTEJA JUNTO CON SUS SERES QUERIDOS.

¡¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO 2010!!!!

HAYDÉE NORMA PODESTÁ - (Para muchos de mis amigos, HEIDI)

martes, 22 de diciembre de 2009

FELICES FIESTAS



Gente necesaria

Hay gente que con solo decir una palabra
enciende las ilusiones y los rosales.
Que con solo sonreír entre los ojos
nos invita a viajar por otra zona.
Nos hace recorrer toda la magia.

Hay gente que con solo dar la mano
rompe la soledad, pone la mesa,
sirve el puchero, coloca las guirnaldas
y con solo empuñar una guitarra
hace una sinfonía de entre casa.

Hay gente que con solo abrir la boca
llega hasta los límites del alma,
alimenta una flor, invita sueños,
hace cantar el vino en las tinajas...
y después se queda sin nada.

Hay quien se va de novio con la vida
desterrando una muerte solitaria,
pues sabe que a la vuelta de la esquina,
hay gente que es así, tan necesaria!!!!!

Hamlet Lima Quintana




PARA TODA LA HERMOSA GENTE QUE HABITA ESTE PLANETA, LES DESEO SONRISAS EN EL ALMA...SUEÑOS E ILUSIONES...LAS GANAS PARA CONVERTIRLOS EN PROYECTOS DE VIDA ...Y LA FORTALEZA NECESARIA PARA CONCRETARLOS EN REALIDADES.


SON MIS DESEOS QUE TODO LO QUE FLORECE EN LOS CORAZONES: ANHELOS DE PAZ, DE AMOR, DE BIENESTAR, DE FELICIDAD, SE CORRESPONDAN A LO LARGO DEL AÑO CON LA ESPERANZA DE UN MUNDO MEJOR, LA SOLIDARIDAD HACIA TODOS LOS HOMBRES Y LA REALIDAD DE UNA JUSTICIA SOCIAL QUE HAGA DE NUESTROS PAÍSES LUGARES DIGNOS DE SER HABITADOS SIN DISTINCIONES ENTRE LOS SERES HUMANOS.


TAL VEZ PAREZCA UNA UTOPÍA...PERO SI SUMAMOS TODAS LAS UTOPÍAS, ALGÚN DÍA, EN ALGÚN TIEMPO, SERÁN UNA REALIDAD.


UN ENORME BESOABRAZO QUE NOS CONTENGA A TODOS HERMANADOS EN EL AMOR
UNIVERSAL QUE ENCARNÓ EN ESE HUMILDE NIÑO NACIDO EN UN PESEBRE PERO QUE REAVIVÓ EN LAS ALMAS EL DESEO DE SER MEJORES PERSONAS.




¡¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!! ¡¡¡FELICES FIESTAS!!!!


¡¡¡¡FELIZ 2010!!!!


CON MUCHO CARIÑO....HEIDI


Haydée Norma Podestá






domingo, 13 de diciembre de 2009

SILENCIOS


Presiento, amor, los latidos de tu sangre.
Intuyo tu respiración acompasada.
Cavilo en tu intimidad de pensamientos.
Palpito tu sentimiento más profundo.
Y en esa identificación
con la verdad mejor guardada
por tu alma
se me revelan todas las verdades
presentidas...
y el corazón justifica
los silencios.

Dicen que siempre brilla el sol
tras las tormentas...
y nuestro sol sigue amaneciendo
cada día
en este cíclico conocer
que nos amamos
desde el soplo mismo
que nos dio la vida.

Más allá de eso
-lo mundano-
nada importa.
Más allá de eso
-lo del alma-
importa todo.

Te amo
-vos lo sabés-
y a mí me basta.
Haydée Norma Podestá
Rosario, 13/12/09







lunes, 7 de diciembre de 2009

EL CAMINANTE

El caminante sentía que sus fuerzas se agotaban, cuando la débil señal de una columna de humo, alentó sus esperanzas de hallar vida en aquel páramo, hasta ese momento desierto, para sus ansias de compañía.
A veces, la soledad es deseable como la amada imposible de locas quimeras. Pero muchas otras veces se desploma abrumadora sobre las criaturas, atando sus voluntades a la tierra. En esos momentos, los pies semejan raíces que se prenden a las entrañas ávidas de Gea, como anticipando el sueño que nos convierte en una eternidad polvácea.
Hasta ese volátil instante en que descubriera la pequeñísima línea de humo negro, sus pies se habían enredado en un andar trastabillante, reclamado con desesperación por el vientre planetario, casi impidiéndole avanzar. Después, fue distinto. Incluso el paisaje grávido por el espeso manto de nieve, pareció iluminarse. Quizás las sensaciones de un sendero lumínico estuvieran alentadas por la aparición del impávido rostro lunar entre las grietas de las nubes. Pero, cualquiera fuese la causa, la compañera argenta de la noche le marcaba un sendero de luz en la oscuridad que, por alguna razón inexplicable, nacía entre sus pies y se alejaba perdiéndose en dirección a la desdibujada columnita de humo. El resto de los elementos, a su alrededor, continuaba la realidad agreste y solitaria del entorno. Sólo esa estrecha senda fosforescente viboreaba hacia el calor que prometía alguna cabaña. Porque donde hay humo, hay fuego…un hogar, personas, voces, manos amigas, alimentos calientes…
Sus entrañas le desgarraron el hambre con sonoros gemidos, haciéndolo consciente. Hambre y cansancio. Muy pronto, ya no tendrían razón de ser.
Enderezó la espalda, alivianó el morral despojándolo de todo lo que consideró superfluo y encaminó su fatiga para alcanzar ese pequeño resquicio de vida que lo atraía hacia delante. ¡Qué importaban los dedos al borde del congelamiento! Allá los liberaría de trapos y zapatones para abrirlos, moverlos, acariciarlos al calor de la lumbre. La sensación de sus manos masajeando los pies desnudos fue tan vívida que éstos recobraron sensaciones del calor perdido en la extenuante caminata. Por un momento, hasta imaginó a una muchacha calentando sus pies con pequeños y furtivos besos.
Tan de prisa caminaba que su respiración comenzó a molestarle. El golpe del hambre le llenaba la boca con saliva espesa. Un hilillo de baba se perdía entre la barba, congelándose en cristales de luz sobre la misma. También el aire tibio que exhalaba su resuello se congelaba y los pulmones resistían con dolor el ímpetu de la marcha. Todo su cuerpo era un dolor que avanzaba ávidamente hacia la tenue columnita de humo, casi etérea en la soledad del paisaje. Agotamiento agonizante que tenía en aquella su norte de esperanza, calculó que apenas media hora de su vida lo separaban del calor vitalizante de la cabaña.
Avanzó, trepó, descendió, se deslizó; a veces tropezando, a veces con fuerzas nuevas. Cuando casi comprobó que tras la lomada estaba su salvación, sacando las fuerzas postreras, echó a correr hasta alcanzar la cima…¡y la vio!
Muy cerca estaba la ansiada columnita de humo casi apagándose sobre los despojos de la cabaña incendiada, reducida a una mancha mucho más negra que la oscuridad que regresaba para envolverlo en su manto de desesperanza.
Otra vez solo con el hambre, con el dolor, con el viento; con las voces del silencio estepario; con el presentido aullido de los lobos. Hasta la luna habíase escondido tras las nubes, robándole la ilusión de otro camino fosforescente sobre la frialdad inescrutable del paisaje nevado.

Haydée Norma Podestá
Rosario, 09/ 11/ 09

sábado, 5 de diciembre de 2009

INVOCACIÓN FLUVIAL (A mi amado Paraná)

Oh río soñador como pájaro marrón que busca el alba.

Oh camalote, flotante isla verdiazul del agua.

Oh saucedal ondeante que besa al río con sus ramas.

Oh surubí que saltas, arlequín instantáneo, pirueta extraña.

Oh nube, reflejada en el espejo caminante que no aguarda.
Oh pájaro que cruzas un momento y te pierdes en la nada.
Oh pescador, duro y sombrío, que denuncias tu hambre con la tanza.
Oh velero que en rauda estela te escapas.




Oh mi sangre fluvial que se dilata.
Oh mi carne pluvial que se recarga
con el río, el camalote, el pescador,
la nube, el pájaro
y el saucedal
que tiembla
y que me abraza.
Haydée Norma Podestá